Una rutina de cuidado facial bien establecida es la clave para una piel radiante y saludable. Tanto si eres principiante como experta en belleza, seguir estos 5 pasos esenciales te ayudará a conseguir los mejores resultados.
1. Limpieza: la base de todo
Siempre empieza limpiando tu rostro por la mañana y por la noche. Un buen limpiador elimina las impurezas, el maquillaje y el exceso de grasa sin irritar la piel. Elige una fórmula adecuada para tu tipo de piel para obtener mejores resultados.
2. Tonificación para equilibrar
El tónico reequilibra el pH de la piel después de la limpieza y la prepara para absorber mejor los productos de cuidado facial posteriores. Aplícalo con un disco de algodón o directamente con las manos dando suaves toques.
3. El sérum: el concentrado de ingredientes activos
Los sérums son fórmulas concentradas de ingredientes activos que tratan problemas específicos: hidratación, antienvejecimiento, luminosidad o imperfecciones. Unas pocas gotas bastan para nutrir la piel en profundidad. 
4. Hidratación diaria
Es fundamental usar una crema hidratante adecuada para tu tipo de piel. Mantiene la hidratación, protege la barrera cutánea y le da a tu piel un aspecto sano y radiante.
5. Protección solar
Por la mañana, no olvides aplicar siempre protector solar, incluso en días nublados. Es el paso antienvejecimiento más importante para preservar la juventud de tu piel. 
Nuestro consejo: La constancia es clave para el éxito. Sigue esta rutina mañana y noche para ver resultados visibles en pocas semanas.